Una alternativa que encontramos los corredores para los días en los que hace mucho frío, mucho calor o las condiciones meteorológicas no son las más propicias, es correr en la cinta. De hecho, hacer este tipo de ejercicio durante media hora al día es una gran decisión para mantener un buen estado cardiovascular. Sin embargo, es muy habitual sentir molestias al correr en la cinta.
Lesiones más comunes al correr en cinta
Independientemente de que seamos corredores expertos o amateurs, uno de los problemas de utilizar una cinta para correr es que somos más propensos a un determinado tipo de lesiones, ya que la técnica de pisada casi siempre varía a la que realizados al aire libre. En la cinta la pisada es menos fluida y el impacto en las rodillas es mayor.
- Tibial anterior. El tibial anterior está situado entre el tobillo y la rodilla. Aunque la zona que se suele cargar con más facilidad al correr, es la que se encuentra justo a la altura del tobillo. Este problema se produce porque no hacemos el movimiento del pie completo, no apoyamos bien la planta en la cinta. Por tanto, una de las soluciones puede ser subir la inclinación de la cinta. Para que la carga no se concentre en esa zona.
- Cadera y lumbares. En muchas ocasiones no tenemos la misma postura cuando corremos en la calle a cuando corremos en la cinta. La manera correcta es mantener la espalda y la cadera rectas y erguidas. Sin embargo, en la cinta tenemos tendencia a desplazar la cadera ligeramente hacia atrás y vamos más encorvados. La solución es mantener el tronco lo más recto posible alineado con la cadera.
- Espalda. Los problemas de espalda se producen por una mala postura del tronco y también por el impacto mayor al correr en la cinta. En muchas ocasiones, corremos inclinados para delante y con los brazos en una postura muy diferente a la que ponemos al correr por la calle. Por tanto, tenemos que tratar de colocarnos lo más erguidos posible. El segundo problema es que, al correr en la cinta, el impacto del peso es mayor. Por tanto, la única solución a esto es correr menos tiempo -más de 40 minutos es excesivo en la cinta- o emplear zapatillas con mayor amortiguación.
- Gemelos. El cuarto problema más frecuente es la sobrecarga en los gemelos. Al igual que ocurre con el tibial. Cargamos en solo una zona todo el peso del cuerpo y recibimos ahí todo el impacto. Generalmente, en la cinta tenemos tendencia a correr con las rodillas más flexionadas y el cuerpo más encorvado. Por tanto, mantener una postura erguida. Correr con un poco de inclinación y utilizar buen calzado podrían ayudarnos a solucionar algunos de estos problemas.
¿Es malo correr en la cinta?
Esta es una cuestión muy repetida por todos aquellos que vamos al gimnasio con habitualidad. La respuesta es que no, no es malo. Los problemas se producen cuando abusamos de los tiempos. Como ya hemos dicho, correr en la cinta es muy distinto a correr en la calle. Principalmente porque la pisada es menos fluida y el impacto en las articulaciones es mayor. Sin embargo, esto no quiere decir que sea malo y no tengamos que hacer uso de esta máquina.
Utilizar una máquina para correr no es malo, pero os recomendamos hacer sesiones no superiores a 1 hora
Lo recomendable sería no utilizarla más de 60 minutos por sesión. Además de correr, un buen uso que podemos darle a la cinta es utilizar los niveles de inclinación. Podemos caminar probando a subir elevaciones durante varios minutos. Ya que este es un ejercicio muy bueno para fortalecer gemelos y cuádriceps.
¿Por qué utilizar una cinta para correr?
Si somos corredores habituales no debemos buscar en la cinta un sustitutivo de correr en la calle, sino un ejercicio complementario. Correr en la cinta nos permite hacerlo sin tener que sufrir las inclemencias del tiempo, pero también nos ayuda a mejorar el braceo al correr, a corregir la postura, a mejorar la técnica y a mejorar la velocidad. Normalmente, el número de zancadas por minuto es mayor en la cinta.
Correr en cinta tiene muchas cosas buenas. Entre ellas que mejora la velocidad y facilita el entrenamiento de tipo series
La otra utilidad es entrenar las series. En una máquina es mucho más sencillo hacerlo y se pueden combinar con sesiones de tipo hiit (alta intensidad), que además son lo más recomendado para adelgazar y perder grasa.
Técnica correcta
La manera correcta para no sentir molestias al correr en la cinta es colocarnos con la espalda recta y erguida, alineada con la cadera. Intentar no flexionar las rodillas en exceso; utilizar la inclinación para no cargar el peso en el tibial y apoyar primero la planta del pie, en lugar del talón.
Por último, os dejamos este vídeo en el que se muestra la gran cantidad de ejercicios que podemos practicar en una cinta, además del propio running:
3 comentarios
No entiendo eso de que es más dañino para las rodillas. En una cinta de gama media/alta que vienen super amortiguadas es precisamente lo contrario. Ahora que ando algo pasado de peso, corro en cinta y como nuevo al día siguiente. Salgo a correr un día por asfalto y al día siguiente me duelen las piernas por todos lados. Conclusión, al menos hasta que baje 3-4 kilos no vuelvo a salir al asfalto.
Quizas no debería salir al asfalto y si más a circuitos de tierra, seguro que no tiene tanta sobrecarga.
¿Se puede correr en cinta o andar en cinta padeciendo ciática? Llevo años corriendo , y parece ser que he topado con la ciática . Por mucho que leo no llego a tenerlo claro. Si andas en vez de correr una hora a un paso ligero …¿Podría empeorar la situación?
saludos