El aceite de coco es un producto popular en la industria de la alimentación y la belleza, pero es importante conocer sus beneficios y efectos secundarios y contraindicaciones antes de utilizarlo.
Además de utilizarse frecuentemente en la producción de jabones, cosméticos y productos para el cabello, cada vez son más los que utilizan el aceite de coco como alimento para cocinar, lo que unido a algunas de sus propiedades, hacen que se sume a la lista de los (mal) llamados súperalimentos.
Es importante tener en cuenta que los descubrimientos del aceite de coco aún necesitan más investigación y que los resultados pueden variar de persona a persona. Se recomienda hablar con un médico antes de incluir el aceite de coco en la dieta o usarlo como producto de belleza.
Beneficios del aceite de coco
Aliado en la cocina
Además de agregar un toque exótico al plato, el aceite de coco virgen extra soporta altas temperaturas. A diferencia de otros aceites vegetales, como el aceite de colza o el aceite de nuez, el aceite de coco no se deteriora con el calor, no pierde sus beneficios, no se oxida y no se vuelve tóxico. Algunos doctores aseguran incluso que para cocinar es mejor que el aceite de oliva.
Propiedades depurativas
El aceite de coco puede ayudar a combatir las bacterias y a liminar infecciones. Esto se debe en parte a su gran contenido en ácido láurico.
Piel saludable
El aceite de coco es un hidratante natural que puede ayudar a mantener la piel suave y hidratada.
Salud del cabello
El aceite de coco es un tratamiento efectivo para el cabello seco y dañado, ayudando a fortalecer y suavizar el cabello.
Mejora de la digestión
El aceite de coco es rico en ácidos grasos de cadena media, que son más fácilmente digeridos que otros tipos de grasas. Esto puede mejorar la digestión y reducir la inflamación.
Control de azúcar en la sangre
Algunos estudios han demostrado que el aceite de coco puede ayudar a controlar los niveles de azúcar en la sangre en personas con diabetes.
Contraindicaciones
Poco valor nutritivo
Los valores nutricionales del aceite de coco son muy bajos. No contiene proteínas, ni vitaminas (excepto una pequeña aportación de vitamina E que es antioxidante).
Aumento del colesterol
El aceite de coco es muy rico en grasas saturadas, que son malas para la salud y que los doctores aseguran que influyen negativamente en la salud cardiovascular. Puede aumentar los niveles de colesterol LDL «malo» en la sangre. Esto puede aumentar el riesgo de enfermedades del corazón.
Alergias
Algunas personas pueden ser alérgicas al aceite de coco, lo que puede causar reacciones alérgicas como urticaria, erupciones cutáneas…
Cómo usar el aceite de coco
El aceite de coco es muy usado en dietas bajas en carbohidratos o dietas cetogénicas. Siempre te aconsejamos es que si te decides a cocinar con este tipo de condimento, te decidas por el aceite de coco virgen extra, que se obtiene tras prensar la pulpa en frío. Lo mejor es que el resultado se consigue sin necesidad de procesos físicos o químicos (tan solo se filtra para evitar que se cuelen trozos de pulpa), lo que hace que conserve intactas todas sus propiedades.
El aceite de coco puedes usarlo para postres, tostadas, para freír, hornear… las posibilidades son muchas y tus platos tendrán un sabor novedoso y exquisito, pero recuerda que se solidifica por debajo de unos 22-24 grados, por lo que es más difícil usarlo en aliños.
También puede usarse para mejorar tu salud, como producto hidratante. Aplica una pequeña cantidad de aceite de coco en tus manos y cuerpo después de ducharte para hidratar y suavizar tu piel.
En conclusión, el aceite de coco es un producto versátil y con muchas propiedades, pero es importante ser conscientes de sus posibles efectos secundarios y contraindicaciones antes de utilizarlo. Consulte con un médico antes de incluirlo en su dieta.