Los higos son una fruta deliciosa y de sabor dulce que tiene su origen en Oriente Próximo. De hecho, es una de las primeras plantas cultivadas por el hombre. Existen muchas variedades, aunque las más comunes son Mission, Brown Turkey, Kadota, Sierra, Tiger y Golden.
La fruta es especialmente popular en los climas mediterráneos, donde se han cultivado durante miles de años -se cree que son una de las primeras plantas cultivadas por el ser humano- pero su fama ha traspasado fronteras gracias a sus numerosas propiedades y su valor nutricional.
Valor Nutricional
Un higo fresco aporta una cantidad significativa de fibra, vitaminas A, B1 y B2, magnesio, cobre, hierro, fósforo y manganeso. Además, es rico en antioxidantes y tiene un contenido bajo en calorías (aunque se crea lo contrario), lo cual lo convierte en un excelente snack para los deportistas.
Según una investigación publicada en Food Research International, los higos presentan un alto contenido en polifenoles y antioxidantes, sustancias que juegan un papel clave en la prevención de enfermedades cardiovasculares y degenerativas.
Si decides incorporar un par de higos a tu dieta diaria, estarás añadiendo un cóctel nutricional muy completo a tu alimentación. En tan solo dos higos, obtendrás una buena cantidad de fibra, la cual es esencial para una digestión saludable y una liberación sostenida de energía, algo muy útil en esos entrenamientos de resistencia.
Dos higos tienen un peso aproximado de 100 gramos y, en esa porción, encontrarás alrededor de 80 calorías, 19 gramos de carbohidratos y 3 gramos de fibra. Además, estarás consumiendo una fuente natural de antioxidantes, potasio y diversas vitaminas del grupo B. El potasio es especialmente valioso para los corredores, ya que ayuda en la recuperación muscular y en el equilibrio de fluidos. Los higos también son ricos en calcio y magnesio, minerales que contribuyen al fortalecimiento óseo. En resumen, esos dos pequeños higos pueden hacer una gran diferencia en tu bienestar general y en tu rendimiento como corredor.
Beneficios de los higos
Más allá de su dulzor natural y su textura agradable, los higos están cargados de nutrientes que pueden beneficiar tanto nuestros entrenamientos como nuestra recuperación. Sus principales beneficios son:
¿Cómo incorporar higos a tu dieta?
Añadir higos a tu dieta diaria es súper sencillo. Puedes consumirlos frescos, secos o en algunos de tus platos principales. A mí personalmente me encanta poner higos en la ensalada y jugar con la mezcla de dulce/salado. Son una de las frutas más ricas y que además solo podrás encontrarla durante un periodo muy reducido del año. En España solo hay brevas al final de la primavera y higos al final del verano y principios del otoño. Un alimento que te vendrá genial, especialmente si eres deportista.